martes, 4 de julio de 2017

Evangelio según san Mateo (8,23-27)




En aquel tiempo, subió Jesús a la barca, y sus discípulos lo siguieron. De pronto, se levantó un temporal tan fuerte que la barca desaparecía entre las olas; él dormía. Se acercaron los discípulos y lo despertaron, gritándole: «¡Señor, sálvanos, que nos hundimos!» 
 Él les dijo: «¡Cobardes! ¡Qué poca fe!»Se puso en pie, increpó a los vientos y al lago, y vino una gran calma.Ellos se preguntaban admirados: 
 «¿Quién es éste? ¡Hasta el viento y el agua le obedecen!»  
Palabra del Señor

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